Aeropuertos; de lo absurdo y su seguridad.

Bienvenidos al aeropuerto de Kathmandú, Nepal... pasarás por un control de seguridad para entrar al aeropuerto, otro para subir las escaleras que te llevan a inmigración, el típico para dirigirte hacia la puerta de embarque y otro, justo antes de subir al avión, a los pies de la escalerilla que te hace sentir tan cerca y tan lejos... Siempre, una fila para hombres y otra para mujeres, mochila de mano por rayos-X y revisión manual, y cacheo manual y conciso por parte de una amable policía o no tan amable, por cada rincón de tu cuerpo serrano, detrás de una especie de cortina de ducha, para que no hayan mirones, delicadamente, una por una, vamos pasando por sus manos. Mochila y tarjeta de embarque se van llenando de sellos...
Por fin arriba del avión, todo revisado y requeterevisado, tú, palpada y revisada, todo en orden, con ganas de llegar a destino, o no, porque Delhi... es para pensárselo!
Maletas en la cinta transportadora, en unas extrañas bandejas y con mil pegatinas de seguridad... Por fin aparece la mia, que casi pesa más que yo... huele a gasolina, está mojada... menos mal que aquí lo más importante es la seguridad! Ah! me han abierto una cremallera y forzado un candado, Cómo se me ha ocurrido llevar un mechero en mi maleta! Varias maletas abiertas, forzadas, para sacar los mecheros facturados que la gente, inocentemente, transporta entre su ropa interior, sin saber que han estado a punto de ser un asunto de estado. Tendrán tan buen control con las mercancías realmente peligrosas? o la fijación con los mecheros símplemente es porque son coleccionistas?
Acompañados de los mecheros, también se llevaron mis gafas de vista, a lo mejor también las consideraron peligrosas, por si hacía un fuego con el efecto lupa. Gracias KingFisher, por dejarme ciega y sin poderme alumbrar el camino.
En India también pasas controles de rayos-X en mochilas y cacheo para entrar en el metro, donde también te quitan mecheros y cerillas, pero eso no es un problema si vienes del aeropuerto!
Llegar a España, no fue mucho mejor, sí que es verdad que la seguridad no es tan puntillosa, pero tienen otros detalles poco agradables. Iberia, en sus vuelos operados por AirNostrum, ese avión tipo avioneta que parece de juguete; cuando está el vuelo lleno, a veces no cabe todo el equipaje en bodega, así que lo dejan en el aeropuerto de salida y ya te lo entregarán en tu destino cuando tengan sitio en los próximos vuelos, te venga bien o no, y es el procedimiento normal... ¿normal?
Qué suerte poder volar como un pájaro y ahorrarse toda esta morralla absurda, controlada por buitres, frente a ellos, somos pequeños gorrioncillos.



Foto: Noelia Villodre.

2 réplicas:

Así lo viví yo... hubiese preferido estar en sobreaviso, por eso lo escribí, por si a alguien le sirve para futuros viajes. Gracias por comentar.